Defensores de sus asuntos de derecho familiar en Culpeper, VA

Un divorcio sin culpa se basa en el tiempo transcurrido desde que las partes se separaron con la intención de permanecer separadas permanentemente. Este divorcio no alega una causa de culpa como adulterio, abandono o crueldad. Las partes pueden solicitar un divorcio sin culpa después de un período de seis meses de separación si no tienen hijos menores en común y cuentan con un acuerdo de reparto de bienes firmado que resuelve todos los problemas derivados de su separación. Las partes deben esperar doce meses para un divorcio sin culpa si tienen hijos menores en común, independientemente de si tienen o no un acuerdo de reparto de bienes.

Un divorcio de mutuo acuerdo y sin culpa tarda aproximadamente 45 días en completarse una vez cumplido el período de separación establecido anteriormente. Si el divorcio es contencioso, lo que implica que existen cuestiones de culpa, custodia, régimen de visitas, manutención de los hijos y del cónyuge, o división de bienes, no hay forma de estimar cuánto tiempo tomaría completarlo. Si el divorcio es muy complejo, no es inusual que tarde de 2 a 3 años en resolverse.

Para un divorcio sin culpa, debe haber estado separado durante 6 meses si no tiene hijos menores con su cónyuge y cuenta con un acuerdo de división de bienes firmado. Si tiene hijos menores con su cónyuge, debe esperar 12 meses antes de poder solicitar un divorcio sin culpa. Un divorcio contencioso basado en una causal de culpa puede presentarse en cualquier momento después de que se haya producido la culpa, como el adulterio, el abandono, la violencia u otro acto que lo justifique.

La manutención infantil se determina según las normas legales del Código de Virginia. Estas normas se presumen correctas, pero pueden ser refutadas en circunstancias extraordinarias.

Durante la minoría de edad del menor, el Tribunal se reserva la facultad de modificar la custodia, el régimen de visitas y la manutención, basándose en cambios sustanciales en las circunstancias y en lo que sea más conveniente para el menor. Los padres no pueden hacer que la custodia, el régimen de visitas y la manutención sean inmodificables, ya que el Tribunal siempre se reserva la facultad de modificar la custodia, el régimen de visitas y la manutención, basándose en lo que sea más conveniente para el menor en ese momento.